En el corazón de la historieta española, donde la creatividad y el humor se entrelazan para crear magia, emerge una figura que ha dejado una huella imborrable: Francisco Ibáñez .

Nacido en 1936, en una España de posguerra, Ibáñez supo capturar la esencia de la sociedad en sus viñetas. Con un lápiz y una imaginación sin límites, creó universos en los que los lectores encontraban un refugio cómico en medio de la cotidianidad. Entre sus páginas, el absurdo y la crítica social se daban la mano de manera ingeniosa y mordaz, haciendo que lo ridículo y lo hilarante convivieran.

De su pluma nacieron iconos de la cultura popular como Mortadelo y Filemón ,Rompetechos ,El Botones Sacarino y Pepe Gotera y Otilio.

Ibáñez, con su humor agudo, supo retratar las debilidades humanas, las burocracias absurdas y las peripecias del día a día, a través de gags visuales que resonaban con la realidad de su tiempo, pero que, increíblemente, siguen siendo actuales. Su estilo único, con personajes de movimientos exagerados y expresiones desbordantes, es inconfundible y ha marcado a generaciones de artistas y lectores.

Pero más allá del legado tangible de sus viñetas, Ibáñez es un símbolo de perseverancia, dedicación y amor por el arte del cómic. Durante más de seis décadas, su prolífica carrera nos ha enseñado que el humor es una poderosa herramienta para observar y comprender el mundo. Francisco Ibáñez no solo es un creador, es un cronista del alma humana, uno que nos ha regalado la risa como antídoto para las adversidades.

Este año el cartel de  la 3 edición del salón del cómic hemos querido rendirle este merecido homenaje, mezclando unos de los parajes  más icónicos de Muro, la Peña del Flare ,la Hernita de San Antonio y el Tio Pep, con unos de sus más famosos personajes Mortadelo y Filemón con esta cartel reconocemos su inmenso talento, sino también su capacidad para unirnos a todos a través de sus historias. Francisco Ibáñez fue y será un referente del noveno arte, sino también por ser el gran arquitecto de sonrisas que ha dejado una huella indeleble en la cultura española.

Gracias